La segunda presentación del cantante Sabino iluminó los corazones de miles de fanáticos, el maestro del Sab Hop, hizo vibrar el icónico Palacio de los Deportes el 28 de septiembre de 2023. El cronómetro en cuenta regresiva marcó el inicio de un concierto que ya se había convertido en leyenda antes de que las luces se atenuaran. El recinto estaba abarrotado de seguidores ansiosos, y el telón se levantó con el rapero de Guadalajara listo para hacernos brincar, bailar y cantar a todo pulmón.
La velada comenzó con su himno, “Sab Hop”, y a partir de ahí, Sabino nos guió a través de las emociones y los ritmos que han definido su carrera. “Pregúntale a mis ex” y “Colorin colorado” siguieron, y el público, fiel y apasionado, no dejó de cantar cada estrofa.
Pero no fue solo la música lo que hizo que la noche fuera mágica. Sabino estableció una conexión íntima con su audiencia, expresando su gratitud de manera conmovedora:
“Sin lugar a dudas, la mejor noche de mi vida. Los quiero muchísimo gracias por estar aquí. El Sab Hop nos reúne hoy. Esto es mágico, verte hoy aquí es mágico”. Estas palabras resonaron en los corazones de todos los presentes mientras continuaba interpretando canciones como “Vaquerer?” y “Toda la noche”.
La voz de Sabino fluía con una energía contagiosa, acompañada de músicos talentosos. “La magia” y “Todo se me resbala” complementaron un repertorio diverso y emocionante.
Pero la noche no se trató solo de música; fue un viaje emocional en el que Sabino compartió su gratitud y amor con su audiencia. Durante “Ajenos”, pidió a sus fans que iluminaran el recinto con las luces de sus teléfonos, creando un espectáculo visual impresionante.
“Cachitos” y “Diamante” hicieron que todos bailaran, y Sabino, fiel a su estilo, hizo sonar una grabadora antigua que añadió un toque retro y nostálgico a la noche. “Ego” y “El día de tu muerte” llenaron el Palacio de los Deportes con papeles pequeños que caían desde lo alto, creando una experiencia verdaderamente inolvidable.
La segunda parte del concierto comenzó con “Colibrí”, y el cantante cambió su atuendo a un saco beige y una camiseta negra. Canciones como “Volvernos a topar”, “Maripositas” y “Martes” continuaron cautivando a los fanáticos del Sab Hop.
La noche culminó con temas como “Guapa!” que hizo que la pista y las gradas del Palacio se llenaran de aplausos y gritos de admiración. Sabino incluso sorprendió al público al tocar una guitarra eléctrica, elevando aún más la energía en el recinto.
Antes de despedirse, Sabino expresó su agradecimiento de una manera que llegó al corazón de todos:
“A mí me cuestan mucho trabajo las despedidas, entonces antes de que me vaya, quiero decirte que te quiero mucho. Esta es la primera fecha que se anunció y ve nomás. La llenaste con tu luz. Hoy nos acompaña el Pablito que se miró al espejo. Me estás cumpliendo mi sueño”.
El espectáculo llegó a su fin con una serie de éxitos que mantuvieron a la audiencia en movimiento, incluyendo “Única testigo”, “Dime tú”, “Contigo siempre”, “Nuevequince”, “Me puse pedo” y un emocionante dueto con LNG SHOT en “Los raros de la clase”.
Con su segundo concierto agotado en el Palacio de los Deportes, Sabino demostró una vez más por qué es una de las estrellas más brillantes del Sab Hop. Esta noche fue mucho más que música; fue una experiencia emocional, un recordatorio del poder de la música para unir a las personas y crear recuerdos que durarán toda la vida. Sabino, con su carisma y talento, dejó una marca imborrable en el corazón de sus seguidores. Y aunque esta noche llegó a su fin, el legado del Sab Hop seguirá resonando en cada rincón de la Ciudad de México y más allá.